El Doctor Jacobo Grinberg, lo dijo más de una vez. Desde el punto de vista de la CONCIENCIA, la única información válida es la vivencial, la experiencia. No obstante, como si de una contradicción se tratara, el mismo libro MEDITACIÓN AUTOALUSIVA de Grinberg, se divide en una Primera Parte Teórica y luego una Segunda Parte Práctica ¿A qué se debe esta aparente contradicción? La información teórica, aunque a muchos les duela, debe ser coherente con la parte vivencial. La teoría es el mapa del camino y la experiencia es el recorrido. Ni siquiera intentes experimentar este tipo de meditación sin haber entendido la parte teórica. Corres como loco hacia cualquier lado, como “pollo sin cabeza” y el resultado final, con todo y práctica, será un rotundo fracaso. Y eso por no querer entender una pequeña lista de conceptos, que garantizan la correcta práctica de la mejor meditación que disponemos, en la actualidad. No hagas ese tremendo viaje sin el mapa del camino, corres el peligro de llegar a un sitio muy diferente del que deseabas ir Giulio Tononi, neurocientífico y profesor de la Universidad de Wisconsin-Madison, propuso la teoría de la información integrada (IIT, por sus siglas en inglés) para abordar la cuestión de la conciencia desde un enfoque científico.
Según la IIT, la conciencia se relaciona con la cantidad de información integrada que un sistema procesa. La información integrada se refiere a la cantidad de conexiones y patrones que un sistema puede mantener y procesar de manera integrada.
Así, la información por sí sola puede ser útil, pero su verdadero valor radica en cómo se integra y se relaciona con nuestra experiencia y comprensión del mundo. Si no se procesa de manera significativa y se aplica en un contexto relevante, la información puede carecer de impacto en nuestra conciencia y en nuestro crecimiento personal.
En resumen, la información integrada, según la IIT, es un aspecto clave en la comprensión de la conciencia y puede influir en la percepción de nosotros mismos y del mundo que nos rodea. Integrar la información de manera significativa es fundamental para alcanzar un nivel más alto de conciencia y comprensión personal.
En lo que llamamos “realidad” por consenso, existen mucho ejemplos, tal vez el más ilustrativo sea el entrelazamiento cuántico. Un fenómeno fascinante en la física cuántica donde dos partículas, después de interactuar de cierta manera, quedan entrelazadas a nivel cuántico, de tal manera que las propiedades de una se encuentran intrínsecamente relacionadas con las de la otra, sin importar la distancia entre ellas. Este fenómeno ha llevado a las reflexiones sobre la naturaleza fundamental de la realidad y ha generado debates filosóficos sobre la conexión entre partículas entrelazadas.
El entrelazamiento cuántico puede servir como un ejemplo interesante de información integrada en el contexto de la conciencia. Si consideramos el entrelazamiento cuántico en un sentido metafórico, podríamos verlo como una representación de la interconexión tanto dentro de nuestra propia conciencia como entre individuos y con el universo en su conjunto.En este sentido, podríamos imaginar que cada individuo es como una partícula entrelazada en un sistema cuántico, donde nuestras experiencias, pensamientos y emociones están interconectados de manera sutil. Esta interconexión podría sugerir que, de alguna manera, lo que experimenta un individuo podría resonar o influir en otros de formas que aún no comprendemos completamente.
Así, el entrelazamiento cuántico podría inspirar reflexiones sobre la naturaleza de la conciencia colectiva, la empatía y la interconexión de todos los seres y fenómenos en el universo. Aunque las implicaciones exactas de este fenómeno en términos de conciencia y conexión entre los seres vivos siguen siendo objeto de debate y exploración, su estudio nos invita a contemplar la complejidad y la interdependencia de la realidad integrada en la que vivimos, aunque sea una ilusión, que se conoce como MAYA, existente, como toda ilusión.
Así que, lejos de terminar esta reflexión, nos queda muy claro, que toda información se puede y, de hecho, se debe integrar para lograr resultados coherentes.