Así que hablar de bienestar personal, en TODOS los “aspectos” de la vida de un Ser Humano, para muchos parece una broma de mal gusto.
Sucede que referirse a “todos los aspectos,”no tiene nada que ver con el ENFOQUE HOLÍSTICO. Estamos tan acostumbrados a dividir la vida en muchas partes, que siempre una o más de una, tendrá problemas o desajustes. “Tengo que ser rico para ser feliz” o “Necesito encontrar el gran amor de mi vida y entonces sí que seré totalmente feliz.” ¡El universo no funciona así y lo sabes!
La VIDA, es muchísimo más que partes. No somos un cuerpo que tiene un Alma, sino un Alma que genera un cuerpo para poder experimentar una vida de tres dimensiones. Que las partes son ilusorias, es tan evidente que lo afirmaba Parménides hace 2.500 años, sin ningún tipo de tecnología: “Lo único que es, es el SER,” la multiplicidad que percibimos es una simple ilusión.
No es que retrocedimos, este es un caso especial, que se dio en un momento también de cambios en un momento de la historia y allí quedó, como testimonio que el humano, a veces piensa con el corazón.
Si no tienes muchas ganas de ir al corazón (apurado a causa de la multiplicidad de tus problemas), Te dejo un simple consejo, primero empieza a vibrar en la frecuencia del bienestar y, todo lo demás, por simple resonancia, se acomodará de la manera que necesitas, primero en tu interior y entonces en el exterior, proyectarás una vida de plenitud y bienestar.
Es por ello, que en este caso, el enfoque holístico del bienestar personal, emerge como una respuesta válida que considera primero esa TOTALIDAD que llamamos VIDA y que es mucho más que las suma de sus partes.
Más aún, la mayoría de esas partes con aparentes problemas (en verdad son ilusiones), se arreglan de una manera, que parece milagrosa cuando, desde el interior empezamos a resonar en la frecuencia del bienestar.
Aunque no lo acepta la mayoría, porque no les conviene para sus intereses egoístas, que siempre son parciales, el EGO no sabe, ni puede saber lo que es la TOTALIDAD. Siento mucho contradecir al ego, pero la vida es una realidad HOLODINÁMICA, como le llamaba David Bohm.
Esa cosa que llamamos el exterior de esta experiencia, no tiene existencia propia, es una proyección (por resonancia), de todo lo que sucede en el interior ¡Allí es donde tiene lugar toda la acción de tu vida!
Así que a olvidar las partes y a trabajar directo con la TOTALIDAD, con la Conciencia, con el Ser o como tú le llames, lo demás se arregla solo.